Versión transformista de “La última cena” en inauguración de los Juegos Olímpicos generó polémica
Durante la inauguración de los Juegos Olímpicos Paris 2024, se generó una polémica en redes sociales tras la recreación del famoso cuadro de La última cena
La performance fue parte de la ceremonia inaugural del evento, en donde una gran cantidad de artistas de la comunidad LGBTQ+, aparecen imitando a la famosa obra.
Cada apóstol y Jesús, pintados por Leonardo Da Vinci, fueron personificados por transformistas.
Luego de esto, algunos sectores conservadores se vieron ofuscados por la representación, expresando críticas con duros epítetos. Por esta parte, usuarios calificaron el skecht como una “parodia”.
¿Qué opinan?
— Emmanuel Rincón (@EmmaRincon) July 26, 2024
“¡Indignante! Para cerrar la inauguracion de los Juegos Olímpicos de Paris, representaron de manera profana, a drag queen en una referencia a LaÚltima cena de Jesús. La degradación del mundo occidental está en sus picos”, escribió un usuario
“Decadente, satánica y despreciable inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024: Se han burlado de Cristo con una parodia de la Última Cena con transexuales. Francia no habría podido hacer nada más lamentable y deleznable”, escribió otro.
Por otro lado, otros cibernautas agradecieron la representatividad de la diversidad en el evento que fue visto por millones de televidentes.
Junto a la recreación de la famosa pintura, también se mostró una performance protagonizada por Dionisio, en el que el dios griego aparece “servido” ante los comensales.
Cabe señalar que La última cena es un cuadro del famoso Leonardo Da Vinci, que representa la última comida de Jesús con sus apóstoles antes de ser traicionado por Judas.
Esta obra artística, que se encuentra en Milán (Italia) y mide 880 centímetros de ancho y 460 centímetros de alto, fue declarada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1980.
Además de esta presentación, la inauguración de los Juegos Olímpicos estuvo marcada por otros llamativos números.
Uno de ellos, protagonizado por la banda de metal Gojira, el que comenzó con María Antonieta cantando con su cabeza decapitada y que también generó millones de comentarios.