Hombre destruyó con su auto altar de templo en San Vicente: Dijo que ‘el Padre Pío lo iba a buscar’
Un insólito hecho ocurrió en la comuna de San Vicente de Tagua Tagua, región de O’Higgins, en que un sujeto ingresó con su auto hasta el altar de la Parroquia Nuestra Señora de la Merced.
La situación se dio ayer 20 de mayo, donde se generó destrozos en la puerta principal del templo y en las bancas del recinto. Personal de Carabineros y Bomberos tuvieron que llegar al lugar para controlar la situación.
El sujeto que causó los daños fue detenido por personal policial. Según lo mencionado por testigos, el sujeto quemó los neumáticos de su auto dentro del templo -al impactar con los escalones del altar-.
Según información de gente en la zona, el hombre índicó que ‘el padre Pío me viene a buscar’ y que debía irse con él.
En diálogo con el medio BioBioChile, el párroco, Padre Osvaldo Rodríguez, contó que alrededor de “las 22:15 recibí una llamada de una catequista que me comentó que salía humo de la Parroquia. Al llegar al lugar, al encender las luces, había humo y un auto que llegó al altar mayor“.
En esa línea, dijo que “Al principio creíamos que era un robo, portonazo, o algún tipo de atentado. Tuvimos mucho temor inicialmente; porque no sabíamos si estaba vivo o fallecida la persona al volante (…) tenía delirios místicos”, agregó el padre.
Luego al lugar llegaron diversos vecinos, donde se mostraron temerosos por lo que estaba ocurriendo. “Porque salía mucho humo del interior del templo. Entonces, al ver que la puerta principal estaba destruida, más la mampara. La comunidad preocupada porque estaba todo destruido”, complementó el párroco.
ES UN MONUMENTO HISTÓRICO
Cabe señalar que la Parroquia de Zúñiga es un monumento histórico nacional construido en una “Zona Típica”. En ese sentido, los vecinos han realizado muchos esfuerzos para costear el proyecto de restauración, pero sin éxito.
“El próximo 14 de septiembre cumpliremos 100 años de la Fundación de la Parroquia, pero el templo data de los orígenes del pueblo hace más de 250 años”, dijo el Padre Rodríguez.
A pesar de los daños, el párroco ve este incidente como una oportunidad para la comunidad. “Es una oportunidad para tomar conciencia del sentido de pertenencia, ya que el templo es parte de la historia de este pueblo”, afirmó.
En cuanto al hombre que causó los danños, el padre manifestó que “sólo nos queda rezar por él, él no estaba en sus cabales (…) le pedimos a Dios que le dé lucidez. Los que estábamos ahí, la gran mayoría, a pesar de los daños, nos conmovía, porque claramente no estaba bien» concluyó.